Acaba de salir en España un documental de Netflix denominado “El lado oscuro del bisturí”. Lo recomendamos no con ánimo de alarmar a la población sino más bien de concienciar sobre hechos que ya están comentados en esta página web.
El documental señala la pobre reglamentación para la aprobación del uso de los “medical devices” o dispositivos médicos, a través de estudios en los que no se aclara si esto es mejor para la salud o si tienen efectos secundarios importantes. El requisito es que el dispositivo sea parecido a los previos, para ser aprobado por el organismo regulador (FDA). Como ejemplo, el estudio de la mallas vaginales para la incontinencia urinaria en las mujeres. Su implantación transforma la zona donde se coloca en “un conglomerado cicatricial rígido y duro, que obliga a reintervenir por problemas adicionales a una de cada 16 mujeres”. Ver los datos de la evolución de la pobre evidencia a lo largo de los últimos 20 años en este tema y las diferencias publicaciones al respecto; estas mallas ya no se aconsejan en el Reino Unido. Continuar leyendo »