Los medios de comunicación se están haciendo eco del escándalo del Tamiflú.
Desde hace cinco años los investigadores de la Colaboración Cochrane han intentado conocer los datos completos de los ensayos clínicos sobre este fármaco en el que se han gastado millones de dólares. La negativa de los laboratorios fabricantes ha costado a los sistemas de salud del mundo entero más de 20.000 millones de dólares, empleados en la adquisición y almacenamiento de estos medicamentos que finalmente no servían para lo que se pretendía mejorar, reducir las complicaciones que producía la gripe y que obligaba a ingresos en los hospitales por neumonías, otitis medias o sinusitis. No se ha podido demostrar y finalmente lo único que se ha acreditado son sus efectos secundarios. Continuar leyendo »