Publicar todos los resultados y facilitar el acceso a ellos
La publicación selectiva de los resultados de la investigación puede producir graves sesgos. Algunos estudios «negativos» nunca llegan a publicarse cuando los resultados no coinciden con las expectativas de los investigadores o los patrocinadores. Sin la publicación de un informe que cuente la historia, esos ensayos desaparecen sin dejar rastro. [8]
Más aún, los resultados de ensayos publicados pueden informarse de un modo selectivo, es decir, algunos de los resultados se excluyen porque no son tan «positivos» para el tratamiento que está en estudio. [9] Los pacientes han sufrido y han muerto debido a informes tendenciosos de la investigación sobre los efectos de los tratamientos.
Esta práctica es contraria a la ética y a la ciencia.