Mastectomía radical clásica (de Halstead)

La mastectomía radical, ideada a finales del siglo XIX por William Halsted, fue la operación que se hizo con mayor frecuencia para el cáncer de mama durante casi tres cuartas partes del siglo XX. Además de extirpar toda la mama, el cirujano quitaba el músculo pectoral mayor que cubre la pared torácica. El músculo pectoral menor, más pequeño, también se extirpaba para facilitar al cirujano el acceso a la axila, con objeto de extraer los ganglios linfáticos y la grasa que los rodea.

Las mastectomías radicales ampliadas

La creencia de que «cuanto más, mejor» condujo a algunos cirujanos radicales a realizar operaciones aún más extensas, en las que también se extirpaban las cadenas de ganglios linfáticos debajo de la clavícula y los ganglios linfáticos mamarios internos que están debajo del esternón. Para esto último, se levantaban varias costillas y el esternón se abría con un cincel. No satisfechos con lo anterior, algunos cirujanos llegaron a amputar el brazo del lado afectado y a extirpar diversas glándulas de todo el cuerpo (suprarrenales, hipófisis, ovarios) para suprimir la producción de hormonas que, según se creía, «fomentaban» la diseminación del tumor.

Si una mujer sobrevivía a tales operaciones, quedaba con una caja torácica gravemente mutilada, difícil de ocultar debajo de cualquier tipo de ropa. Si la cirugía se practicaba en el lado izquierdo, el corazón quedaba cubierto apenas por una delgada capa de piel.

Adapted from Lerner BH, The breast cancer wars: hope, fear and the pursuit of a cure in twentieth-century America. New York; Oxford University Press, 2003.